MARTE, ESE PLANETA

Este artículo se pensó para un especial de la fenecida revista PulpMagazine. Posteriormetne se publicó en la primera encarnación de la WEB de Atlantea. Al cambiar de dominio desapareció. Es hora de rescatarlo.

Crónicas Marcianas

Que el planeta Marte está actualmente de moda no es ninguna sorpresa. Las misiones a Marte se multiplican, se envían sondas para, tal vez, planificar un futuro vuelo tripulado a ese astro ocre que tanto parece atraer a los terrestres. La sonda Patfhinder, la Mars Odyssey que, en mayo de 2002 descubrió indicios racionales de agua congelada, son algunas de las variadas ocasiones en que los terrestres, por medio de estos objetos interpuestos, han rozado o aterrizado en la superficie del planeta con nombre del dios romano de la guerra. Recuérdese que Marte era originalmente el dios de la fertilidad para los romanos, cuando contactaron con la cultura griega, vieron que eso de la fertilidad era muy soso y plagiaron descaradamente del dios Ares sus características guerreras (estaban locos esos romanos).
Esta es la realidad. Pero la ficción, mucho antes de estos vuelos interplanetarios, ya había tratado en infinidad de ocasiones acerca de ese cuarto planeta, según se cuenta desde el Sol.
Marte, en el cine, se ha tratado fundamentalmente en dos vertientes: El viaje y la exploración de Marte por parte de las naves terrestres, y la visita de sus habitantes, los marcianos, a nuestra Tierra con fines normalmente hostiles. Por evidentes cuestiones de espacio es imposible contar, ni siquiera relacionar, todas y cada una de las películas o series de televisión que han tratado sobre Marte, sus habitantes o sus exploraciones. Es por ello por lo que este artículo no es ni mucho menos intensivo, pero puede dar una idea de lo que se ha elaborado con Marte como escenario o protagonista.
Marte tiene un problema fundamental; todo extraterrestre o invasor venido de no se sabe donde suele ser denominado marciano. Ya se pueden inventar los yanquis el término alien, alienígena, extraterrestre o lo que sea, que cuando nos referimos a ellos siempre se oye lo mismo: marciano. Por eso es marciano desde E.T., hasta Yoda, pasando por Marvin, este sí que lo es de verdad, y Klaatu. Se podría decir que marciano es un término que equivale a: "tipejo de por ahí fuera, habitualmente feo, raro, con tentáculos o verde". Y su planeta de origen, como el dios al cual homenajea, siempre ha sido objeto de recelo y temor.
Comencemos, pues, el recorrido por Marte, a través de los ojos de los cineastas, que nos han ofrecido por medio de su imaginación, y la de los guionistas, como era, es o podrá ser Marte.

HASTA LOS AÑOS 40

Hemos de empezar por algún sitio, y que mejor comienzo que el de los propios inicios del cine. En 1903 ya se realiza Trip to Mars y en 1910, producida por Edison, otra película del mismo título. En esta última, incluso salen marcianos. En 1913 se estrena Un Mensaje de Marte, dirigida por D. Wallet Waler. Es la historia de un marciano, que mediante un invento de alta tecnología, una bola de cristal, ve que un terrestre va por el mal camino. Ni corto ni perezoso se traslada a la Tierra para llevarlo por el buen camino. Se inventó, aquí, el pepito grillo marciano. Obviamente es una recreación del cuento de navidad de Dickens, trasladando el fantasma a la personalidad del marciano. En 1920 sendas películas danesa e italiana se titulan Trip to Mars. Ya en 1923 se produce M.A.R.S., conocida también como Radio Manía y dirigida por Roy William Neil. Estas serían las primeras películas que tratarían el tema Marte.
El año siguiente, 1924, se produce y estrena una película clásica del género de la ciencia ficción; Aelita. Es una producción de la Unión Soviética, dirigida por Yakov Protazanov y su guión basado en una novela de Alekseï Tolstoï, con el mismo título del filme. La premisa argumental es un viejo estereotipo de la ciencia ficción: el inventor adelantado a su era, en este caso será un ingeniero de nombre Los, que construye un aparato revolucionario, en forma de esfera, capaz de llegar a hasta Marte. Después de una bronca con su mujer, eufemismo para decir que la asesina, no tiene mas remedio que hacer el viaje, acompañado de un soldado rojo, Gussev, y del detective Kravkov, que estaba investigando la muerte de la esposa y que se cuela, como posteriormente harían Hernández y Fernández, en la nave. Llegado a Marte, Los, se enamorará de la reina Aelita, la soberana del planeta. Una revuelta de esclavos, animados por el rojo, y una traición de Aelita, hacen que Los se despierte y vea que todo ha sido un sueño y que nada ha acontecido. En realidad la visita a Marte es simplemente una excusa propagandística con la intención de obtener una película aceptable como espectáculo y que ideológicamente aleccionara convenientemente al pueblo soviético. A este respecto, es notable la arenga que efectúa Gussev a los obreros marcianos: "Camaradas, contar únicamente con vosotros mismos. Reagruparos en una Unión Marciana de trabajadores, junto a la República Socialista Soviética". Como se puede ver, es imposible ser más diáfano. Pese a esta profunda carga ideológica, contiene muchos aciertos. Es destacable un diseño de producción excelente, con decorados de vanguardia, de estilo constructivista y cubista. Nos encontramos con multitud de descubrimientos en este diseño de producción, que posteriormente serían usados en otras películas de ciencia ficción: Las puertas se abren como diafragmas, el traje de Gor, guardian de la energía, está formado por tubos de plástico, los centinelas son muy similares a robots, las escaleras se muestran con direcciones imposibles (recordar Harry Potter) o el diseño de la Torre de Energía Radiante. Como curiosidad, las escenas, en las que los obreros se revelan contra la clase dominante, serían usadas en la serie Flash Gordon que realizaría la Universal en los años 30.
Años mas tarde, el 30 de octubre de 1938, o sea en la noche de difuntos, conocida por los norteamericanos como halloween, se produce un acontecimiento mediático extraordinario. Orson Welles, al frente del Mercury Theater on the Air, emite una dramatización, lo que ahora conoceríamos como docudrama, de la novela de H.G. Welles, La Guerra de los Mundos. El guión era de Howard Koch (uno de los guionistas de Casablanca), y el propio Welles. La emisión fue tan buena que provocó un pánico generalizado en los Estados Unidos. El pueblo norteamericano creyó realmente que nuestro planeta estaba siendo invadido por naves de Marte, que habían aterrizado en Grovers Hill, estado de New Jersey. La adaptación contenía elementos innovadores para su época como mezclar un programa de variedades, en el que la orquesta de Ramón Roquello tocaba en directo, con interpretaciones de los actores, como si éstos fueran reporteros que, en directo, retransmitían la llegada de los marcianos. Aunque la emisión había sido previamente anunciada, cualquier oyente, que se incorporara a la radio mediada la emisión, podía creer que lo que se estaba contando era cierta. Se calcula que un millón de personas cayeron en una histeria colectiva, con abandono de las ciudades y colapsos circulatorios varios. Se podría afirmar que esa emisión fue el Bromazo del Siglo XX, aunque, bien es cierto, que no fue intencionado. Una película de 1975, La noche que asustó a América, dirigida por Joseph Sargent (el Darryl de embrujada), contó, haciendo hincapié en los variados brotes de histeria, lo que ocurrió esa noche de halloween.
También en 1938 el héroe del comic Flash Gordon participa en una aventura marciana en la película titulada Marte Ataca al Mundo, dirigida por Ford Beebe y Robert Hill y también conocida como El Rayo Mortal de Marte. En 15 capítulos, la productora Republic retoma el personaje que, en esta ocasión, realiza un viaje al cuarto planeta a fin de frustrar los malvados planes de Ming el Cruel.
El Ataque del Monstruo Púrpura, es el bonito titulo para una producción de 1945, dirigida por Spencer Gordon Bennet, en 12 capítulos para la Republic. También Marte está presente en su argumento. En este caso una nave marciana se pega una chufa contra la Tierra. El superviviente del aterrizaje es un bicho capaz de tomar forma humana, que intenta sabotear el proyecto de construcción de una cohete, mediante el ingenioso método de robar las piezas para hacerse él su propia nave. Un agente del servicio secreto, que es conocido y señalado por todos como agente secreto, intentará detener al criminal. El monstruo púrpura del titulo no aparece en todo el metraje. El recurso de inventar esa habilidad camaleónica, hace que el presupuesto se recorte en cuestión de FX
1948 es el año en que hace su debut en los dibujos animados Marvin el Marciano, enemigo declarado del conejo de la suerte, es decir de Bugs Bunny. A partir de ese momento, el enanito cabezón de Marvin, aparecería en otros episodios incluyendo su activa participación en Space Jam.

AÑOS 50

Cohete K-M (1950) de Kurt Newmann es una película de viajes espaciales. Se estrenó deprisa y corriendo para hacerle la puñeta a Con destino a la Luna. El cohete K-1 parte hacia la luna, pero en el viaje se descalabra y como quien no quiere la cosa aterriza en Marte, cosa inaudita pero divertida.
Vuelo a Marte dirigida en 1951 por Lesley Selander, es una réplica de la ya mencionada Con Destino a la Luna de George Pal. La carrera espacial llega al cine americano y si unos estudios van a la Luna otros, para no quedarse atrás, se atreven a ir mas lejos. El primer vuelo a Marte lleva a bordo a unos científicos y a un periodista (no, no es Tintín). Al llegar al planeta encuentran una civilización igual a la terrestre que sufre doliente la escasez de un metal importantísimo el Corium. Como están caninos de ese metal planean un fabuloso complot, consistente en robarles a los terrestres el cohete y de paso conquistar la Tierra. Pero los buenos marcianos que, viven en el interior del planeta, ayudan a detener el maquiavélico plan.
También de 1951 es El Tripulante del platillo volante de Marte un serial de la Republic, en 12 capítulos, dirigido por Fred C. Brannon y con guión de Ronald Davidson. Un extraño aparato cae en la Tierra derribado por un rayo atómico experimental. El superviviente llamado Mota (es el mismo monstruo púrpura del serial de 1945, antes reseñado), átomo al revés, es recogido por el Dr. Bryant, industrial y fabricante de armas. El Dr., con un pasado nazi-malvado, ayuda a Mota en sus planes de conquistar la Tierra. Tenemos las cosas típicas de los seriales, peleas, persecuciones y como siempre finales de los episodios con el protagonista a punto de palmarla, para enganchar a los espectadores en el siguiente.
Marte el planeta rojo se estrena en 1952, en pleno auge de la guerra fría. Estuvo dirigida por Harry Horner y contó con el protagonismo de Peter Graves (Misión Imposible). Según Pedro Duque (1) "esta película es la más grosera muestra de la cruzada anticomunista del maccarthismo". La trama se centra en la recepción de un mensaje desde Marte, en el que se le cuenta a los terrestres que el planeta rojo está socialmente configurado como una utopía socialista. El mensaje resulta ser falso y sólo es una conspiración soviética, dirigida por un científico ex-nazi, para provocar confusión en el mundo libre. Y ahora viene lo bueno: se recibe un mensaje real de Marte describiendo que la sociedad marciana está basada en la libre empresa y el capitalismo. Eso no es todo: Marte esta gobernada directamente por Dios, nada de personas interpuestas como el Papa, directamente por Él . La consecuencia de este mensaje es que todos los soviéticos se convierten. Un benevolente Zar católico se hace con el poder y aquí paz y después gloria. Como diría un ilustre ex ministro patrio: "Manda huevos".
Zombis de la estratosfera, es un serial de la productora Republic fechado en 1952. Se retoma el personaje del Capitán Cody. Éste, es una especie de superhéroe con un casco y una mochila reactora (copiado de Rocketeer), que pertenece al glorioso cuerpo de la Policía Celeste del Universo. Este personaje ha de enfrentarse a una conspiración marciana, que pretende desplazar a Marte de su órbita, colocarlo en la órbita de nuestro planeta y de paso cargarse la Tierra, para dejar hueco, supongo. El motivo es sencillo: en Marte hace mucho frío y aquí se está mas calientito.
La incursión de los payasos Budd Abbot y Lou Costello en el género fantástico se produjo en muchas películas. En el tema que nos ocupa, interpretaron, y es un decir, Abbott y Costello hacia Marte en 1953. La frase publicitaria era "Demasiado locos para un solo mundo". Y efectivamente se van a Marte. La pena es que volvieron y nos avasallaron con sus impresionantes actuaciones humorísticas.
Por suerte, para los adictos al género, en el mismo año de 1953 se estrena Invasores de Marte dirigida por William Cameron Menzies. Un niño ve, desde su ventana, la llegada de un ovni. Nadie lo cree pero empieza a notar en su entorno que la gente empieza a cambiar. El pobre niño tiene que lidiar con la tarea de ver que su entorno se transforma. Nadie lo cree y lo que es peor, su padre queda en poder de los marcianos, y poco a poco resto del pueblo se va convirtiendo en siervos de los invasores. El ejército, sin embargo, se da por enterado interviniendo con poco éxito contra los alienígenas. Al final el chaval se despierta, todo ha sido un sueño, peor al mirar por la ventana observa la misma escena de su sueño: la llegada del ovni.
Llegamos a la famosa película La guerra de los mundos que, producida por George Pal y dirigida por Byron Haskin en 1953, recrea, por primera vez para la pantalla, la famosa novela de Welles. Casi se diría que sigue en parte la emisión radifónico del otro Welles, ya que la invasión marciana se produce en los USA y no en Inglaterra como en la novela. Se da un cambio de loock en las máquinas invasoras marcianas, que pasan de ser trípodes andantes, a naves voladoras con un ojo desintegrador. El final de la película se produce en Los Ángeles. Gene Barry, el protagonista, busca a su chica creyendo que todo está perdido y que los marcianos han triunfado. Como en la novela, los marcianos perecen según las palabras de Welles, "por las formas de vida más simples que Dios en su sabiduría infinita puso en la Tierra", o sea las bacterias. Obtuvo un oscar a los mejores efectos especiales
Los británicos también se lanzan a la producción de películas con tema marciano. Devil Girl From Mars es un film que, en 1954, dirigió David MacDonald. En la campiña escocesa y en una hostería se reúnen unos personajes. Son los personajes típicos que se pueden encontrar en este tipo de establecimientos apartados. Un convicto fugado, una niña mona, un periodista y un científico. Aterriza por allí un platillo volante, de Marte como es lógico, tripulado por una maciza, vestida de cuero negro, y un robot de construcciones y contratas (lleva una luz de gálibo en la cabeza, lo que le da un aspecto de buldózer impresionante). La marciana viene a llevarse a todo varón que se le ponga a tiro, para repoblar su mundo que se ha quedado sin hombres. Pese a las insinuaciones de la maciza, los varones, no se lanzan voluntarios al grito de yo primero, yo primero. Mas bien rechazan incomprensiblemente la proposición. Ya se sabe, la famosa flema británica... Debo advertir que la película no es una comedia, y que las cosas se toman en serio. Los espectadores no, claro.
En el terreno del cine hispano Luis Lucia, dirige en 1955 La Lupa. Extraña película en la que podemos asistir a la investigación de unos aficionados a las novelas de misterio que crean una agencia de detectives. Investigan un caso de aterrizaje de marcianos en una finca. Todo resulta ser un montaje de un especulador asustaviejas (2) , que quiere apoderarse de una mina sita debajo de la finca de unas ancianas. Al final de la película aparecerá un auténtico marciano que desbaratará los planes del pérfido industrial. Una rareza.
1955 nos ofrece la posibilidad de ver La Conquista del Espacio, que no tiene nada que ver con Star Trek. Dirigida por Byron Haskin, nos cuenta como en 1980, ¡optimistas!, una tripulación internacional explora Marte. Como curiosidad veremos en pantalla una estación espacial orbital, estilo a la de 2001 odisea del espacio.
Otro clásico de la serie B es La invasión de los hombres de los platillos volantes, dirigida por el habitual del género Edward L. Cahn en 1957. Se trata de una teenager-movie, apta para sesiones de Drive-in, o sea cines de verano con coche incluido. Los jovenzuelos protagonistas atropellan a un enano cabezón rarísimo. El enano, los actores son realmente enanos, es la avanzadilla de una invasión marciana que pretende lo que todos se pueden imaginar: ¡Invadir la Tierra!, si señor. Para ello cuentan con un líquido adormecedor de mentes, que, inyectado directamente a la yugular, provoca la indefensión del sujeto, y su sometimiento a la voluntad marciana. Es como una borrachera de metílico, pero mas científica. Por supuesto los jóvenes, acostumbrados al bebercio, abortarán la invasión. Pura serie B, sección casposa.
Eso, el terror de mas allá del espacio, es una mas de las clásicas películas de serie B, con influencias en el cine futuro. Dirigida, una vez mas, por Edward L. Cahn en 1958, nos sitúa en una misión de rescate a Marte. Una expedición anterior ha sido masacrada y se sospecha del único superviviente de la misma. Pero yo no he sido, que diría Bart Simpson, ha sido Eso. Eso, es un monstruo extraterrestre que tiene la fea costumbre de merendarse a los humanos que pilla de improviso. Los astronautas de la segunda expedición, se enfrentan con todo su armamento al bicho, pero no logran nada. Hasta que deciden abrir las compuertas, y el monstruo es lanzado fuera de la nave y se supone que casca malamente. Si les ha recordado el argumento de una película posterior, en la que sale una muchacha en bragas, matando un Alien del mismo modo, se trata simplemente de una coincidencia. No sean mal pensados.
1959 es el año de La furia del planeta rojo dirigida por Ib Melchior. En un futuro cercano, una nave terrestre vuelve de un viaje a Marte con los tripulantes hechos unos zorros. La Dra. Irish va recordando en flash-back todo lo que aconteció en la misión Marte. Existe una civilización allí, que no quiere que los terrestres, pendencieros y bravucones cósmicos, osen acercarse a su bonito planeta. Mediante la manipulación mental les hacen ver horrores monstruosos y, con sus poderes, obligan a una fauna variopinta, entre las que incluimos unos vampiros gigantes o plantas carnívoras, a atacar a los terrestres. Por fin pueden escapar, con el aviso de que no vuelvan, ya que no serán bien recibidos. Por cierto, tardan dos meses en llegar a Marte, de lo que se deduce que la rapidez de los cohetes de la época era pasmosa.
En ese mismo año empieza a emitirse en televisión En los límites de la realidad (The Twilight Zone 1959-1964). En la serie hay dos referencias a Marte en dos capítulos diferentes. People Are Alike All Over donde el cosmonauta, Roddy McDowell , arriba a Marte y es sorprendido al encontrar que los marcianos son idénticos a los terrestres. En el episodio Will the Real Martian Please Stand Up, un humano descubre que los marcianos se ocultan entre nosotros.

AÑOS 60

El día que Marte invadió la Tierra dirigida por Maury Dexter en 1963, narra una historia muy original. Durante unas vacaciones, el protagonista observa que sus parientes y amigos se comportan de manera rara. Con gran sorpresa descubriremos que unos extraterrestres marcianos suplantan a los terrestres para así conquistar el planeta. Como pueden ver, es un tema totalmente novedoso, que debido una rara conjunción espacio temporal, hizo que Don Siegel lo percibiera en el pasado y le llevara a realizar La Invasión de los ladrones de cuerpos. Lo único que la redime es que, al final, ganan los marcianos.
Italia nos deleitará con la fabulosa producción Llegaron los Marcianos de 1964, que perpetraron al alimón: Franco Castellano y Giuseppe Moccia. La sinopsis sería la siguiente: los marcianos X1, X2, X3 y X4 llegan a la Tierra con una misión que les ha ordenado la Gran Mente Marciana, uno de los marcianos está interpretado por Alfredo Landa. Como no podía ser otra, la misión es conquistar este planeta. Pero la vida terrestre les atrae de tal manera que, en lugar de cumplir su objetivo, deciden quedarse con los humanos. Así todos contentos y felices.
Tambien de 1964 es la película SantaClaus conquista Marte dirgida por Nicholas Webster. Se trata de una fábula navideña en la cual, el gobierno marciano envía una expedición a la Tierra para raptar a Santa. Los niños marcianos, que ven las emisiones de terlevisión de la Tierra, se sienten tristes por no tener con ellos a Santa Claus. El rapto se producirá y Santa aceptará entregar sus presentes tambien a los marcianitos.
El Mago de Marte es dirigida, en 1964, por David L. Hewitt y con John Carradine como único actor conocido, aunque participa brevemente. En 1974, cuatro astronautas se estrellan en Marte, con el problema añadido de que sólo les quedan cuatro días de oxígeno y víveres. Como son los pupas, una tormenta les hace refugiarse en una caverna dorada. Allí encontrarán una antigua ciudad marciana, gobernada por un mago. Los personajes del mago de Oz, el hombre de hojalata, el espantapájaros y el león, son reinterpretados por los tres cosmonautas varones, mientras que Dorothy es Dorothy, la única componente femenina de la misión.
En la pequeña pantalla una pequeña joya, en forma de serie, hace su aparición en 1964: Mas allá del límite (the Outer Limits). Hay dos capítulos que inciden en el tema de Marte. En Experimento controlado, vemos como dos marcianos descienden a la Tierra para investigar sobre la costumbre terrestre de la muerte. Con una sofisticada máquina del tiempo, observan escenas de muertes famosas. El enemigo invisible nos narra como una serie de expediciones a Marte son secuestradas por un misterioso enemigo.
Otra serie de televisión de la época es Mi marciano favorito (1963-1966). Comedia que tiene como protagonista al Tio Martin, interpretado por Ray Waltson, y a su acogedor en la Tierra, Tim O´Hara, que interpretaría Bill Bixby . El periodista de TV Tim O’Hara, se encuentra con un marciano, cuya nave espacial se ha estrellado contra la Tierra. El marciano intenta reparar su nave y mientras tanto se queda a vivir en la pensión de Lorelei Brow, donde también vive el periodista. Las situaciones cómicas se sucederán, a lo largo de sus 107 capítulos, basándose fundamentalmente en los poderes extraordinarios que posee el marciano y los estropicios caseros que organiza.
Dirigida por Byron Haskin, 1964 nos ofreció Robinson Crusoe en Marte. Sólo con leer el título podremos hacernos una idea de lo que vamos a ver. Efectivamente, una misión a Marte es forzada a aterrizar en le planeta después de la colisión con un meteorito. Un superviviente, Kit, tendrá que afrontar una vida en solitario en el planeta. Encontrará a un superviviente de otra nave, en este caso una simia llamada Mona, que le hará compañía. Posteriormente descubrirá aun humanoide que ha huido de una nave espacial, dedicada a comerciar con carne humanoide. En homenaje a Daniel Defoe, el humanoide será llamado Viernes.
Frankenstein encuentra a los monstruos del espacio, también conocida como Marte invade Puerto Rico, fue dirigida, o eso pensaba el director, por Robert Gaffne en 1965. El monstruo es nada mas y nada menos que un androide de la NASA de nombre Frank, que suponemos será una abreviatura de Frankenstein, que vuelve a la Tierra y aterriza en Puerto Rico, donde desbaratará una conjura marciana que pretendía secuestrar bellas chicas para repoblar su planeta.
Marte necesita mujeres dirigida en 1.966 por Larry Buchanan, es un claro exponente de la compatibilidad genética entre los habitantes de los espacios siderales. Los marcianos tienen pocas hembras y claro hay que recurrir a las bellezas terrestres, que por eso de que están cerca, son un mercado apetecible. Las terrestres deben ser beldades, porque ya que estamos ¿para qué conformarnos con cualquier cosa?, y además científicas, o sea cultivadas -no sirven mises-, para que los bebés marcianos que nazcan sean guapos y además listillos
Planeta sangriento (Queen of Blood), es un típico producto de la factoría Corman, dirigida en 1966 por Curtis Harrington. En el año 1990, se reciben las primeras señales de inteligencia alienígena. Una mensaje del exterior indica que una nave extraterrestre, con un embajador a bordo, ha sido lanzada con rumbo a la Tierra. La nave, desafortunadamente, realiza un aterrizaje de emergencia en Marte. La Tierra decide realizar una misión de emergencia, y desde la base lunar Luna 7 se envía una nave, la Océano, a Marte. La nave consigue llegar, solo para descubrir que no existen supervivientes. Una segunda misión consigue, en Fobos, el satélite de Marte, rescatar a una superviviente de la nave alienígena y trasladarla a Marte, donde les espera la Océano. Una vez iniciado el viaje de vuelta a la Tierra, la extraterrestre despierta y se dedica a sorber la sangre a los tripulantes. Cuando sólo quedan dos, Laura y Alan, la Reina Sangrienta ataca a Alan. Laura intenta defenderlo y con sus uñas rasga la piel de la alien consiguiendo matarla. Pero la alienígena ha esparcido sus huevos por la nave. Esta vez no se trata de marcianos invasores, pero la acción trascurre en el planeta vecino. Menos mal, que esta vez, la alien no es una marciana chupasangres, porque el pobre Marte está quedando fatal desde que empezamos el artículo.
¿Que sucedió entonces?, es una excelente película británica de 1967 dirigida por Roy Ward Baker para la productora Hammer. Es la tercera de la serie dedicada al Dr. Quatemmass y se basa en la serie original de la BBC que se emitió en 1959. La historia comienza en unas obras de ampliación del metro de Londres, donde se descubre unos esqueletos, datados en varios cientos de miles de años. En la misma excavación, que dirige el Dr. Roney, encuentran lo que, en un principio, parece una bomba o proyectil. El ejército, al mando del coronel Breen, es enviado a investigar. Ni que decir tiene que el proyectil no se comporta como debiera. El metal con que está hecho resiste todo intento de cortarlo. Se decide, entonces, intentar perforarlo con un taladro especial, que sólo consigue provocar unas extrañas vibraciones. Se observa, sin embargo, un agujero en el interior del proyectil que se va agrandando ante el asombro de Quatermass y Breen. En una cavidad interior se encuentran unos extraños seres, artrópodos al parecer, cuya edad se fija en 5 millones de años. Mientras que Quatermass y Roney intenta convencer a las autoridades de lo potencialmente peligroso del objeto, este parece tomar vida en forma de una entidad energética que comienza a destruir Londres. Se revela un terrible secreto: somos hijos de los marcianos.
La incursión francesa en el género y en Marte se limita a un solo título: Ne jouez pas avec les martians (no jugar con los marcianos). Fue dirigida en 1967 por Henri Lanoï. Con reminiscencias claras a El Pueblo de los Malditos, la historia se centra en una mujer que da a luz sextillizos, circunstancia improbable, pero posible. Estos sextillizos son en realidad hijos de los marcianos. Una expedición marciana, andróginos con forma parecida a los Talions de Earth: the final conflict, pero vestidos de lamé dorado, vienen a la Tierra a por sus ro-ros. Y se los llevan. Y se acaba la película.
En televisión tenemos la serie Capitan Escarlata, cuyo primer episodio data de 1967. Producida por Gerry y Silvia Anderson narra como los mysterions, una raza marciana, atacan la Tierra y la organización Spectrum es la encargada de defenderla. El Capitán Escarlata, indestructible debido al efecto resurrector marciano, está al frente.
Misión a Marte, 1968 y dirigida por Nick Wesbter, relata la historia de la primera expedición a Marte de tres astronautas norteamericanos, como tiene que ser. En el planeta encontrarán a un astronauta ruso muerto, y un alien en forma de balón.

AÑOS 70

Capricornio Uno, dirigida por Peter Hyams en 1.978, es un film que trata a Marte como una gran broma. La premisa es apabullante: la NASA, o algunos directivos de ella, se han gastado el presupuesto en ni se sabe qué (tal vez vino y mujeres). Como consecuencia de ello la misión a Marte no se puede realizar. Pero se monta un circo, para convencer al publico y a la administración que el viaje se ha realizado. Mediante efectos especiales se reproduce la llegada a Marte (3) y a los tres cosmonautas se les retiene. El problema surge cuando, en la supuesta reentrada en la atmósfera, los astronautas mueren. Esto justificaría el viaje y el dinero invertido pero... ¿qué hacemos con los astronautas, testigos de cargo del fraude?: eliminarlos es la opción más lógica. Los cosmonautas, como es normal, no están muy de acuerdo con la decisión y optan por la solución de poner pies en polvorosa.
En televisión se emite Crónicas Marcianas (no es el Sr. Sardá y su cohorte de horteras), dirigida por Michael Anderson con un metraje de 314 minutos, originalmente en tres episodios titulados: La expedición, Los colonizadores y los marcianos. El guión fue de Richard Matheson, adaptando el libro de relatos homónimo de Ray Bradbury. Fue protagonizada por Rock Hudson (coronel John Wilder), Bernie Casey (Mayor Jeff Spender), Nicholas Hamond (capitan Arthur Black), Darren McGavin (Sam Parkhill) y Roddy McDowall (Padre Stone), entre otros. Las serie refleja algunos de los episodios narrados por Bradbury, pero adolece de defectos graves en el apartado de efectos especiales, que son risibles, y sobre todo en el de interpretaciones. Los actores no se creen lo que están haciendo

AÑOS 80
Invasores de Marte data de 1986. Dirigida por Tobe Hooper, es un remake de la realizada en 1953 por Cameron Menzies. Es un buen remake, que conserva el frescor de la película original. La historia es la misma y los cambios son meramente formales y no inciden en el guión. Unos siervos extraterrestres más monstruosos y unos buenos efectos especiales, hacen que esta segunda versión no desmerezca a la original.
Midnight Movie Massacre, dirigida por Mark Stock en 1988, es una comedia cuya acción transcurre en 1956 y se centra en un cine de sesión continua (Matinee). Los espectadores observan películas de ciencia ficción de los años 50, cuando un marciano, del tipo pulposo, uniojo y tentacular, comienza a matar y a abducir espectadores. Los espectadores no se dan cuenta de nada y creen que los rayos y demás parafernalia, forman parte del espectáculo (un parecido enorme a la película Matinée que protagonizara John Goodman). La película no da mucho de si, pero contiene películas dentro de la misma. Sólo por ver escenas de películas antiguas, merece la pena. Se pasan como trailers en el cine multitud de filmes de serie B de los años 50, que resultan muy interesantes de ver.
El hombre langosta de Marte, dirigida por Stanley Sheff en 1989, nos narra los problemas de impuestos que tiene J.P Shelldrake. Al tener que justificar cuatro millones de dólares, su contable le propone hacer una película de ciencia ficción que sea un fracaso. La película es "El Hombre Langosta de Marte", como era previsible. Marte se está quedando sin aire y el rey de Marte decide que la única solución es llevarse el aire de la tierra. El rey envía al malvado hombre langosta para conseguir sus fines. Tony Curtis y Patrick MacNee son algunos de los actores que intervienen.

AÑOS 90 y los 2000
Desafío total, comienza la década marciana de los 90. Fue dirigida por Paul Verhoeven en 1990, y protagonizada por Arnold Schwarzenegger y Sharon Stone, entre otros. Esta cinta está basada en un cuento de Philip K. Dick titulado Podemos recordarlo todo por usted. El obrero de la construcción Douglas Quaid tiene un sueño recurrente con Marte, en el que se ve como agente secreto en ese planeta. Acude a Recall Inc, una compañías que proporciona memorias ajenas, para comprar unas vacaciones virtuales en Marte. A partir de ese momento veremos como su vida cambia. Los sueños son reales y se le han implantado recuerdos falsos. Su mujer, Sharon, no es su mujer y es una agente secreta. El cabreo de Arnold es considerable, mas que nada por la perdida de la Stone. A partir de ese momento, vivirá aventuras en Marte, intentando descubrir cual es su verdadero pasado. El planeta Marte es recreado aquí como una colonia dirigida dictatorialmente por una multinacional, o multiplanetaria dado el caso. Existe una organización de la resistencia, integrada por mutantes que, debido a las radiaciones de las minas, han sufrido cambios genéticos, que se oponen a la empresa. En conexión con lo más rancio de la ciencia ficción marciana, también veremos los restos de una civilización, desaparecida muchos milenios atrás. Los efectos especiales están en una línea muy aceptable, y la ambientación y el diseño de decorados cumplen sobradamente. A destacar un breve cameo del presidente Pujol, o de Yoda, interpretando el papel de Kuatu, el líder de la resistencia. A este respecto, el Informal dio cumplida cuenta de su aparición.
También es de 1990 Marciano vete a casa. Fue dirigida por David Odell y protagonizada por Randy Quaid (recuerden al piloto borrachín que acaba con la nave alienígena en El día de la Independencia). Está basada en la novela de Frederick Brown del mismo nombre, con guión para la pantalla de Charles S. Hass. El montaje sigue fielmente la novela original. Los marcianos son intangibles, verdes y unos coñazos insufribles. Entrometidos, metijones, cotillas y con muy mala leche. Realmente una de las invasiones mas extrañas, logradas y divertidas. El film fracasa en las situaciones humorísticas que Brown había descrito. Película menor, sin mayor trascendencia.
La teleserie La Guerra de los Mundos se comienza a emitir en Estados Unidos en 1992 (aquí la veríamos en Tele 5 a altas horas de la madrugada). Constó de 41 episodios en total. Los marcianos muertos en la película de 1953, a consecuencia de las bacterias, no están realmente muertos. Están latentes, en suspensión, o algo así. Son revividos por unos terroristas accidentalmente. Gracias a un poder oculto, el poseer cuerpos, se lanzan de nuevo alegremente a conquistar el mundo. Se establece un equipo anti-marcianos formado por el Dr. Harrison Blackwood, la microbióloga Suzanne McCullough, el programador Norton Drake y el Teniente Coronel Paul Ironhorse, que se enfrentarán a ellos. Hay un episodio que es destacable de entre los demás Ojo por ojo. En este capítulo se retuerce el argumento de la invasión con una gran imaginación. Al parecer, los marcianos invasores de 1953 habían enviado una misión de reconocimiento anteriormente, concretamente en 1938. La invasión es repelida en Grover Hills por las tropas americanas y el presidente Rooswelt, para encubrir el asunto, le ordena a Orson Welles que produzca una emisión radiofónica. La verdad es que es un episodio muy interesante, mezclando ficción con realidad de una manera muy creíble.
1998 es el año en el que se estrena Marte Ataca, dirigida por Tim Burton. Con un reparto de lujo, en el que destacan Jack Nicholson, en un triple papel, Glenn Close, Annet Benning o Tom Jones interpretándose a él mismo. Los marcianos invaden la Tierra y, éstos, son unos bichejos pequeñitos, verdes y con cara de calavera. Los marcianos se comportan como se han comportado siempre los invasores en las series B de los 50, es decir, atacando a todo lo que se mueve. La invasión es detenida por fin, gracias a los denodados esfuerzos de una octogenaria y de su canción preferida, que mata marcianos a diestro y siniestro de lo espantosa que es, la canción, no la viejecita. Burton realiza muchos guiños al espectador aficionado a la ciencia ficción, reinterpretando a su aire escenas de viejas películas de serie B. Una comedia deliciosa y muy divertida .
El año 2000, además de ser fin de siglo, de milenio, de pánico por el efecto 2000, que resultó una filfa (cómo se forraron los listos asesores informáticos con el evento), nos trajo varias producciones cinematográficas marcianas.
Planeta Rojo se estrena este año y es dirigida por Anthony Hoffman. Nos narrará las vicisitudes de un equipo de ingeniería que se traslada a Marte, para investigar las causas del fracaso del proyecto de terraformación del planeta. Como las desgracias nunca vienen solas, la nave que les lleva se escoña, y debe hacer un aterrizaje forzoso. En el mismo, para colmo de desdichas, pierden los equipos científicos y las comunicaciones. Además el robotijo exploratorio falla. Para rematar la faena descubrirán que Marte está habitado, y sus habitantes no son precisamente amistosos.
Misión a Marte es otra de las cintas que se estrena este año 2000. Es dirigida por Brian de Palma, un director artesano con títulos notables en su filmografía como Misión Imposible, Carrie o la Furia, todas ellas dentro del género fantástico. La película se divide en dos partes, la primera parecida a Apolo XIII, donde se nos muestra la vida del astronauta común. A partir de estas escenas, mas o menos sensibleras, nos trasladamos a una estación orbital que mantiene el seguimiento de la 1ª expedición a Marte. Un desastroso suceso hace que esta misión quede desconectada de la Tierra. No se sabe nada de ella y se decide enviar una misión de rescate. En esta parte, claramente influida por 2001 una Odisea del espacio, vemos como se desarrolla el viaje a Marte, de manera muy creíble. Como no podía ser de otra manera, y para dar mas acción, un meteorito impacta contra la nave y ésta queda deshabilitada. La tripulación, no sin antes perder a uno de sus miembros, consigue llegar a Marte, para descubrir que existe un superviviente de la primera expedición. Descubren además que existe algo extraño e inteligente en el planeta. Los resultados de la exploración subsiguiente, darán su fruto con el encuentro de una extinta civilización marciana, que al parecer fueron mis padres en un remoto pasado.
Fantasmas de Marte, es la última película que ha dirigido John Carpenter en 2001. El año es 2176 y Marte lleva colonizado muchos años. Con 640.000 habitantes, éstos trabajan fundamentalmente aprovechando los recursos naturales. En una mina, se descubre una antigua civilización marciana, que se supone que se ha conservado en hibernación o éxtasis. Lo marcianos toman los cuerpos de los humanos y se dedican a liberar su planeta de los invasores terrestres. Un equipo policial debe trasladar a un criminal, pero en el camino se deberán enfrentar a las fuerzas marcianas. Así que unen sus fuerzas, el malo y los buenos, para pelearse mejor contra los marcianos.
El último film que vamos a reseñar, es español, pese a su título. Stranded es una realización de 2002 dirigida por Luna (nombre artístico de María Lidon cuando hace de directora). Con un guión original de Juan Miguel Aguilera, es la primera cinta que se produce en este país que aborda la ciencia ficción hard. Nos encontramos en las primeras décadas de siglo XXI. La primera expedición a Marte es un hecho y la misión conjunta NASA-ESA, de exploración marciana es el arco argumental central La nave Ares sufre un fatal accidente al llegar al planeta rojo. Después del aterrizaje de emergencia los astronautas verán que es imposible el rescate para todos y tendrán que decidir quien de ellos deberá palmarla para que los demás sobrevivan. Por supuesto, y como estamos en Marte, encontraremos vestigios de una antigua civilización.
La película, con una nefasta distribución, pocos la han visto, es un loable intento de hacer cine serio dentro de la ciencia ficción en España. ¿Que tiene fallos?, por supuesto. ¿Y qué?. Es un film digno, que tal vez en manos de un director más experto hubiera resultado mejor.

Epílogo
Como habrán podido leer en las líneas previas, Marte ha dado mucho de sí, y de no. Decenas de películas y series han venido a llenar un amplia filmografía que ofrece, como escenario, este cuarto planeta de nuestros amores.
Marte, dentro de la ciencia ficción, ha sido, por tanto, fuente de inspiración en ambientes, y sobre todo en extraterrestres marcianos de diferentes clases y colores. La mayoría de las veces, nuestros vecinos son belicosos. Hay pocos marcianos que sean amigables. Ya se sabe que la vecindad es un factor de riesgo para las disputas. La invasión marciana a la Tierra es, probablemente, el tema más tratado. No le va a la zaga la temática del viaje a ese planeta. Últimamente son 3 películas, en el corto espacio de tres años, las que nos han acercado, con mayor o menor fortuna, a lo que será el viaje de exploración a Marte. Según las últimas noticias, los científicos afirman que será posible realizar el mismo allá por el año 2020. ¿Que encontraremos allí? ¿Ruinas de civilizaciones milenarias? ¿Agua? ¿Bacterias? ¿Formas de vida primitiva? ¿Colonizará la humanidad el planeta? ¿Tendremos que emigrar? No lo sabemos. Pero seguro que nosotros, o nuestros nietos al paso que vamos, conoceremos las maravillas que se pueden esconder en ese lugar tan fascinante.
De momento, tendremos que conformarnos con ver las películas y series, para, al menos, soñar que alguna vez podremos verlo en directo.

NOTAS
1. Pedro Duque es el autor del imprescindible libro Arañas de Marte. Viedoguía de invasiones extraterrestres.
2. Asustaviejas, gaditanismo. Dícese de los personajes, pagados se supone que por las inmobiliarias, que se dedican a amedrentar a personas ancianas, a fin de que dejen las casas en las que viven alquilados. En ese caso la finca se puede tirar o vender y remodelar, con el consabido valor añadido para la inmobiliaria
3. Hay una teoría, circulando en Internet y en sesudos libros informativos, que afirma que el viaje a la Luna fue un montaje, en el más puro estilo Hollywodiense. Es decir: Amstrong nunca se paseo por la luna y sólo fue una realización de efectos especiales. Eso querría decir que el pobre Jesús Hermida se desgañito inútilmente la noche del alunizaje, y que más valdría haber enviado a Carlos Pumares a retrasmitir el acto.

© 2005 Alfonso J. Merelo