504. Andaluces levantaos, si os deja la SGAE
Hace unos días saltó la noticia de que la Sociedad General de Autores, que dirige Teddy Bautista ex líder del grupo Los Canarios, estaba cobrando por los derechos de la “letra” del himno andaluz. Se da la circunstancia de que la letra que creara Blas Infante es de dominio público desde que los herederos en 2001 donaran la propiedad de la misma a los andaluces, a través de la Junta de Andalucía. Eso quiere decir que esta letra ya es de dominio público y cualquier puede usarla sin tener que pagar por ello. La música del himno puede estar sujeta a derechos de interpretación, ya que cualquiera puede hacer una adaptación o arreglo y cobrar por él. Pero la letra…
Con esto quiero decir que “alguien X” lleva desde 2001 cobrando cada vez que se canta la letra del himno. Cobrando por algo que no es suyo y que además está cedido a todo el pueblo andaluz. Es una de las desfachateces más que la SGAE está haciendo.
Yo estoy de acuerdo totalmente en que se protejan los derechos de los autores y que estos no vean mermadas sus posibilidades económicas. La venta de copias ilegales ha de estar vigilada por la autoridades y perseguida por ser una estafa, como es. Ahora bien, una cosa es defender los derechos y otra cosa hacer uso de los derechos de manera abusiva de manera que se produce una “desviación de poder” al enfocar sus objetivos de manera equivocada. La SGAE, que pretende ser una institución que vela por los autores, fracasa estrepitosamente al permitir que verdaderos caraduras se aprovechen del trabajo de otros, y ahora no me refiero a la venta ilegal de CD´s. Hace unos días saltaba la noticia de que alguien se estaba beneficiando de los derechos de algunas coplas de los carnavales de Cádiz, entre otras los famosos tanguillos “Gaditana” y “Los duros antiguos”. Ni lo sautores, ya muertos, ni sus descendientes habían registrado los derechos y por tanto un “cara” los había registrado a su nombre. La SGAE no comprueba la veracidad de la titularidad del derecho, sólo le interesa registrar para poder “sacar beneficio” cuanto mas mejor. Por tanto parece quedar en entredicho que la sociedad lo que quiere es defender a los autores y compositores. Realmente lo que parece constatarse es que sólo quiere recaudar puesto que los porcentajes que se lleva como sociedad gestora son cuantiosos. Si esas recaudaciones van a parar a sus legítimos “dueños” es lo de menos. Eso no es importante. Sólo lo es el cobrar.
Un sociedad gestora que se precie de tal ha defender a sus afiliados. Pero estos han de ser los detentadores legítimos de los derechos de sus obras. Eso no se está haciendo y me temo que no se hará en un futuro próximo. ¿Cuántos autores están siendo defraudados por la ineficacia de control de la entidad? ¿Cuántos ni siquiera saben que otros, que no tienen nada de creadores, se están forrando a costa de esa desinformación? ¿Existe un registro de verdad de autores y obras? ¿Realmente las bases de datos de la SGAE son reales, o sólo se han creado en bases a declaraciones particulares de autoría sin autenticar? Me temo que este último va a ser el caso.
Y así, sin controles, se forman verdaderos lobbys de presión que, naturalmente, hacen lo que pueden y quieren para que sus intereses, sean estos los que fueren, queden a buen recaudo. Las técnicas para salvaguardar estos intereses, que no se engañen sólo son monetarios, a veces rozan la ilegalidad mas absoluta. No se puede, éticamente, introducir un detective privado en una boda para que grabe la música que se está tocando. ¿Se está haciendo negocio con ello o simplemente es una cortesía de la empresa? ¿El ejecutante no paga ya sus impuestos para que encima le recarguen un canon? ¿Y qué hay del canon digital? ¿Se puede cobrar a alguien por si acaso copia música en un CD? Y en mi caso que soy el autor de un libro, el CD que he usado de copia de seguridad de mis archivos escritos por mí ¿Ha de pagar por el derecho a copia? Pero si es mío. ¿Cómo recupero yo ese dinero puesto que no uso el CD para copiar material ajeno sino propio?
Gestionar los derechos de los autores sí.
Expoliar al ciudadano no.
© Alfonso Merelo Solá 2009
ACTUALIZACIÓN.
Hoy me he enterado que la SGAE seguía abonando derechos por el Himno de Andalucía a la familia de Blas Infante porque nadie de la Junta de Andalucía le había comunicado la cesión de los mismos. La dejadez de la Junta de Andalucía, cuando Magdalena Álvarez era la Consejera del ramo, es notoria y habría que echarles la consabida bronca por su falta de diligencia. Pero la SGAE tampoco hace lo que debe de hacer para verificar periódicamente quienes son los detentadores de derechos. Por tanto no me desdigo para nada de los argumentos expuestos anteriormente.
5 comentarios
AMS -
Manuel Nicolás -
Quedamos a comer. Voy a avisar al Mario and company a ver si pueden también.
AMS -
El viernes estoy en la capital ¿te apuntas a una comidita o copillas por ahí?
Manuel Nicolás -
Juanma Escribano -