Por qué esta página
En los últimos días, en la lista de correo ciencia ficción, se ha producido un pequeño debate sobre los blogs, las agendas en red o como queramos llamarlas.
Algunos listeros mantenían que suponía ser presuntuoso el pensar que las opiniones que pueda tener o mi quehacer diario le puedan interesar a todo el mundo. Otros mantenían que el problema estaba en hacer referencia al blog cuando se estaba conversando por correo. Es decir, sí se tenía una opinión sobre algún asunto en concreto, en vez de expresarla en la lista, redirigir a los listeros al blog del susodicho opinante. Como decía, y no es literal, un buen amigo: es como si estás charlando en el bar sobre el Barça y que alguien diga ¡yo tengo una opinión muy particular, pero si quieres escucharla te tienes que pasar por casa!.
Pero el caso es que en esto del blogging, de momento, no hay reglas establecidas. Mas o menos cada uno hace lo que le viene en gana, si bien, por lo que he leído hasta ahora, la norma no escrita implica que casi todos los bloggers, si es que se dice así, escribimos sobre nuestros gustos, expresando mas o menos nuestras opiniones sobre lo humano y lo divino.
En mi caso no pretendería que este blog significara una justificación, porque en realidad no tengo por que darla. Pero hay un hecho claro: estoy escribiendo en un lugar de Internet al que todos los conectados -¡ uppps!, esto suena muy mal- pueden acceder. Entonces la pregunta es: ¿por qué desvelar mis pensamientos al resto de los mortales, que por pocos que sean, que me leen?
Difícil cuestión de resolver. Lo primero que se me viene a la mente es que el ejercicio de escribir, mal o bien eso da igual, es un puro ejemplo de narcisismo. Hay que recordar que el narcisista es aquel tipo tan apegado a sí mismo, que los demás, el resto del mundo, le importan un pimiento, o huevo según las circunstancias y circunloquios. Sin embargo no estoy totalmente de acuerdo con ese encorsetamiento narcisista en el blogger, ya que al menos en mi caso sí me importan los demás, y por eso, tal vez, es por lo que decidí lanzarme a crear una página WEB, o lo que sea.
Es evidente que no es sólo el puro afán altruista lo que me mueve, entre otras cosas porque tampoco tengo mucho que aportar. El escribir supone también una cura de autoestima, porque el ego se envanece cuando alguien lee tus paridas y las comenta, aunque sea para mal. Eso de que hablen de ti aunque sea mal es un verdad de las mas veraces.
Llegados a este punto podré contestar a la pregunta y la respuesta debe ser, a la luz de lo escrito, que me gusta escribir para que me alguien, el posible lector, comparta mis opiniones, o no, pero que al menos las conozca y pueda discutir En una palabra: comunicación. Eso, pienso, es la misión básica de todo ser humano: el compartir con los demás tus propios pensamientos. Sin compartir, desde luego, no merecería la pena vivir.
Así que prometo no interrumpir las lista enviando direcciones de mi blog, pero desde luego seguiré desgranando chorradas mientras siquiera, mi madre- ¡cómo son las madres!, me lea.
© Alfonso Merelo 2004
Algunos listeros mantenían que suponía ser presuntuoso el pensar que las opiniones que pueda tener o mi quehacer diario le puedan interesar a todo el mundo. Otros mantenían que el problema estaba en hacer referencia al blog cuando se estaba conversando por correo. Es decir, sí se tenía una opinión sobre algún asunto en concreto, en vez de expresarla en la lista, redirigir a los listeros al blog del susodicho opinante. Como decía, y no es literal, un buen amigo: es como si estás charlando en el bar sobre el Barça y que alguien diga ¡yo tengo una opinión muy particular, pero si quieres escucharla te tienes que pasar por casa!.
Pero el caso es que en esto del blogging, de momento, no hay reglas establecidas. Mas o menos cada uno hace lo que le viene en gana, si bien, por lo que he leído hasta ahora, la norma no escrita implica que casi todos los bloggers, si es que se dice así, escribimos sobre nuestros gustos, expresando mas o menos nuestras opiniones sobre lo humano y lo divino.
En mi caso no pretendería que este blog significara una justificación, porque en realidad no tengo por que darla. Pero hay un hecho claro: estoy escribiendo en un lugar de Internet al que todos los conectados -¡ uppps!, esto suena muy mal- pueden acceder. Entonces la pregunta es: ¿por qué desvelar mis pensamientos al resto de los mortales, que por pocos que sean, que me leen?
Difícil cuestión de resolver. Lo primero que se me viene a la mente es que el ejercicio de escribir, mal o bien eso da igual, es un puro ejemplo de narcisismo. Hay que recordar que el narcisista es aquel tipo tan apegado a sí mismo, que los demás, el resto del mundo, le importan un pimiento, o huevo según las circunstancias y circunloquios. Sin embargo no estoy totalmente de acuerdo con ese encorsetamiento narcisista en el blogger, ya que al menos en mi caso sí me importan los demás, y por eso, tal vez, es por lo que decidí lanzarme a crear una página WEB, o lo que sea.
Es evidente que no es sólo el puro afán altruista lo que me mueve, entre otras cosas porque tampoco tengo mucho que aportar. El escribir supone también una cura de autoestima, porque el ego se envanece cuando alguien lee tus paridas y las comenta, aunque sea para mal. Eso de que hablen de ti aunque sea mal es un verdad de las mas veraces.
Llegados a este punto podré contestar a la pregunta y la respuesta debe ser, a la luz de lo escrito, que me gusta escribir para que me alguien, el posible lector, comparta mis opiniones, o no, pero que al menos las conozca y pueda discutir En una palabra: comunicación. Eso, pienso, es la misión básica de todo ser humano: el compartir con los demás tus propios pensamientos. Sin compartir, desde luego, no merecería la pena vivir.
Así que prometo no interrumpir las lista enviando direcciones de mi blog, pero desde luego seguiré desgranando chorradas mientras siquiera, mi madre- ¡cómo son las madres!, me lea.
© Alfonso Merelo 2004
3 comentarios
alfonso -
Salud
pokapeski -
Pues eso, que si he visto muchos blogs que quieren hacer ver al autor como genio no descubierto o como un ti@ curios@ o simplemente un "que guay soy". Personalmente eso no me gusta, pero creo que es imprenscindible para nuestro ignorado ego tener un sitio para reirte del mundo. Donde te camuflas detras de tu pantalla y le dices al mundo lo que no tienes valor (lease huevos) de decirle a la cara. Lo de publicitar tu blog, pienso que entra dentro de esa motivacion de tener un blog. Yo no lo hago porque no me gusta y solo se lo doy a mis amigos y bienvenido sea todo el mundo, pero como dijo el otro, no es bueno que el hombre este solo.
Vamos, digo yo.
pokapeski.
RM -
Y, además, y sabes que la polémica se inició por "culpa" mía, joder, que estaban preguntando por una peli que hace más de mes y medio que habíamos visto todos.