Consejos pal veranito I
Sandalias
Ya hemos llegado al tiempo de los calores, el verano ya está aquí aunque técnicamente sea todavía primavera.
Y con el calor llega la sandalia. La reina del verano. La horrorosa sandalia. Y me refiero a la sandalia de vestir y de hombre. No me refiero a la socorrida chancla playera ni a las espectaculares sandalias que lucen las señoras. Me refiero a esa horrorosa muestra de la cutrez que es calzarse sandalias masculinas con ropa "de vestir".
Vamos a ver ¿no se dan cuenta del terrible efecto que hace una sandalia con unos pantalones de marca? Sencillamente estropea cualquiera atisbo de dignidad que una persona hecha y derecha use una sandalia para vestir por mucho calor que tenga. Puede que sea un prejuicio, pero es algo que no soporto.
Imaginen ustedes un revisor de tren o comandante de avión llevando su uniforme y unas sandalias. O un juez con su toga y sandalia-en tiempos romanos vale, pero ahora...-. Ademas está el perjuicio que puede acarrear a las pituitarias de los mas próximos con esos sudores veraniegos que a todos nos asaltan.
La sandalia se puede usar, como mucho, con unos pantalones cortos que por supuesto nunca jamás se usarán para ir a cenar, al teatro o a tomar copas. Todo los mas su uso está permitido en cerveza mañanera de chiringuito.
Pero aún hay cosas peores que una sandalia con un pantalán largo: pantalón corto, sandalias y ¡calcetines! Eso debería estar directamente penado con cárcel de dos a tres meses para que el fulano reconociera su error.
En verano la sandalia para la playa. Para trabajar se llevan ustedes el socorrido mocasín, siempre y cuando este no sea de rejilla. Este último entra en el grado de pecado mortal. Vayan fresquitos pero sin sandalia. Es un consejo.
© Alfonso Merelo 2007
6 comentarios
AMS -
Comparto lo de ser feliz.
Saludetes
Alós -
Me niego a condenar una forma de vestir.
Amigo Alfonso, esto ya parece un blog rosa, metiéndose con los modelitos de los habituales...
En cualquier momento me vendrás con que he repetido camisa :-D
Cada cual, con lo cada cualo.
Y a ser feliz, que narices...
Un saludín
AMS -
O sea que te estoy llamando de todo menos gentleman :)
V. -
Manuel Nicolás -
Y para recordarles a alguien despreciable, recuerden a Calígula.
Su nombre no significa otra cosa que "sandalias pequeñas"
Está dicho todo.
Francisco Fernández -