630. ¡Indignaos!
Encabezar este post con el título de un panfleto, escrito por Sthéphane Hessel, parece coherente con lo que está ocurriendo de unos días a esta aparte en las ciudades españolas. Por lo que estamos viendo la gente se ha movilizado mínimamente, cosa que deberíamos haber hecho ya hace mucho tiempo. Y digo mínimamente porque dado que hay, o dicen que hay, cinco millones de parados la protesta, y la indignación, debería ser masiva. La ciudadanía debería de tomar la calle para obligar a los políticos a tomar verdaderas medidas para paliar el descalabro, económico y social, que estamos sufriendo.
Este movimiento asociativo parece bastante anárquico. No parece claramente dirigido por nadie concreto, no parece tener una ideología determinada y tampoco parece decantarse por aportar soluciones. Es un movimiento de indignación, de puro cabreo que en principio sólo quiere que tomen nota los grandes partidos de que tal y como se están comportando no vamos a ningún sitio. En definitiva no estamos ante una revolución, porque no se dan las condiciones ni se darán al menos por ahora en España, sino en un intento de que los partidos políticos cambien de actitud en muchas de las cosas que están haciendo mal. Si esto se consigue mínimamente el movimiento asociativo será un éxito.
La Puerta del Sol ayer /Reuters
Y es indudable que algo se está consiguiendo. Algo les ha tocado muy dentro y les ha cogido desprevenidos. La prueba es que se han comenzado ataques furibundos que descalifican el movimiento tachándolo de antisistema, que al parecer es un pecado horrible. Han montado en cólera, sobre todo la prensa y los tertulianos de trapillo, que han acusado de todas los defectos a los manifestantes. Con esas risitas de perdonavidas y superioridad se permitían el lujo de decir que uno de los líderes era un licenciado en derecho que estudiaba oposiciones. ¿Eso lo descalifica para indignarse? El pensamiento único, de la derecha más cavernaria, se encarnó en Amando de Miguel, que en Onda Cero, en el programa de ese otro adalid de la equidad que es Carlos Herrera, soltó perlas de este calibre; “El movimiento del 15M es exactamente igual que el que alzó a los fascismos alemán e italiano en los años 30”. Y más “…y todos éstos fueron movimientos socialistas en origen”. Y continuó con que “está organizado por el PSOE y Rubalcaba”. Es increíble como un tipo que es profesor universitario pueda manipular de una manera tan burda la información. No ha dado ninguna prueba de lo que dice, pero lo suelta en antena y sus corifeos le ríen las gracias. Es puro Goebbels. Y le recuerdo que el fascismo italiano no surgió del socialismo, surgió de la podredumbre de la clase media que se creía superior a los obreros y tenía que demostrarlo. Mussolini sí que militó en el partido socialista, pero está claro que cuando fundó su partido ya no pertenecía a él. Y en todo caso el socialismo actual no tiene nada que ver con el de los años 30. Pero es más fácil no comentar estas cosas para que el oyente crea lo que le interesa a este personajillo.
Foto Viva Huelva/V.G.
No se si este movimiento continuará, pero lo que si se es que ha empezado a asustar a los partidos y a sus dirigentes. Lo vieron como una chiquillada, pero cuando ha continuado consolidándose, sobre todo gracias a las nuevas tecnologías, han visto las orejas al lobo. Rajoy, líder “victo” de la derecha española, decía ayer que era muy fácil acusar a los políticos. Y, por una vez, coincido con él. Los políticos son nuestros empleados, les votamos para que gestionen bien los asuntos ciudadanos y no para que hagan lo que les convenga personalmente. Es una contradicción que se elija a un gestor para que nos arruine o para que haga lo contrario de lo que le decimos. La ciudanía ha de ser escuchada siempre y no sólo cada cuatro años. Y los políticos no son los detentadores de la verdad absoluta ni estamos dispuestos a que paternalmente nos den lo que ellos deciden que han de darnos. Los soberanos somos nosotros, los trabajadores, los ciudadanos y como soberanos que somos han de tratarnos. No les debemos respeto ni pleitesía. Son ellos los que nos deben respetar y obedecer y no al revés.
Esto que parece muy incendiario, que lo es, es sencillamente un ejercicio de lógica de lo más vulgar. El único problema es canalizar estas inquietudes mediante unas vías rápidas y sólidas de consulta. Una democracia más participativa en la que se pueda pulsar la opinión de los ciudadanos y dejar de cumplir lo que dictan los grupos de presión. Nosotros somos mucho más que cien poderosos. Y eso se tiene que reflejar sí o también.
Foto: Huelva24.com
Lo que sigue son un par de frases extraidas de "una carta abierta a los votantes de cualquier partido". Pinchando aquí está el artículo completo.
La realidad es que queremos que vayas a votar, que todo el mundo lo haga, nuestra victoria es abandonar la desidia y la abstención, porque todos los votos son útiles.
Pero lo que te pido es que reflexiones antes de introducir la papeleta en la urna, que seas consciente de que el voto no es solo un derecho, es una responsabilidad para contigo, con tus familiares, con tus amigos y con el resto de la ciudadanía.
¡Indignaos! ¡Rebelaos! En nuestra medida podemos intentar modificar esto. El movimiento ha comenzado, confío en que no se pare, o lo paren.
© Alfonso Merelo 2011
3 comentarios
Mario Moreno Cortina -
Anónimo -
Mario Moreno Cortina -